Hasta la Reserva Natural la Planada del municipio de Ricaurte, llegó la directora territorial Nariño de la Unidad de Restitución de Tierras, Catalina Delgado, para sostener un encuentro con diez autoridades tradicionales indígenas y el gobernador de la comunidad de Pialapí Pueblo Viejo San Miguel Yaré. Dicha comunidad actualmente se encuentra asentada en esta Subregión del piedemonte costero en el departamento de Nariño.
Durante un evento, autoridades tradicionales del Resguardo y funcionarios de la unidad de restitución desarrollaron la Asamblea de Cierre de caracterización de las afectaciones territoriales sufridas con ocasión de la violencia en el municipio.
Propósito
Según lo expresado por Catalina Delgado, “el propósito de la jornada era contar con un espacio de concertación contemplado en el Decreto Reglamentario 4633 de 2011, para que la comunidad, en conjunto con la Unidad de Restitución de Tierras pudieran, de manera detallada, analizar el documento con el que se adopta un informe puntual de las afectaciones territoriales encontradas por los profesionales en campo”.
Adicional a ello, el equipo jurídico socializó las pretensiones judiciales, las cuales serán presentadas ante un Juez de Restitución de Tierras a través de una demanda en los próximos meses. Con esta se busca beneficiar a 491 familias para un total de 1.879 personas, que a la fecha cuentan con un área afectada al interior de su territorio de 13 mil 420 hectáreas más 6 mil 190 metros cuadrados.
Buscan justicia
“Buscamos llegar a la justicia, para que estas familias, a través de un fallo judicial puedan recuperar sus derechos territoriales desarraigados por la violencia”, afirmó la directora territorial. Para la Unidad de Restitución de Tierras, este trabajo desarrollado con la comunidad de Pialapí ha sido importante por las condiciones históricas de abandono, victimización, discriminación, desigualdad y falta de equidad en el acceso a los derechos.
Con estas iniciativas se pretende brindar un apoyo decidido con reconocimiento a las personas afectadas y adelantar un trabajo en procura de garantizar la pervivencia física y cultural de este pueblo indígena, que ha sido víctima del conflicto armado y que ahora desde el gobierno se pretende resarcir de alguna manera las afectaciones causas principalmente las relacionadas con la tierra y el territorio.
