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El informe de la Policía Militar de Río de Janeiro evidencia la crítica situación de violencia en una de las ciudades más populares de Brasil: a lo largo de 2017 un total de 100 uniformados han perdido la vida ejerciendo su labor de protección a la sociedad civil.
La víctima más reciente se dio el pasado fin de semana en Baixada Fluminense: Fábio José Cavalcante e Sá, fue asesinado de un tiro en la cabeza en su intento de frustrar un asalto. El oficial se encontraba fuera de servicio.
Un análisis hecho al respecto por ‘O globo’, detalla que más de un tercio de los uniformados fallecidos, fueron ultimados en áreas que cuentan con Unidades de la Policía Pacificadora. En promedio, cada dos días cae muerto un agente,
Según la Policía Militar, la tasa de muertes de los agentes en Río de Janeiro se ubica 3,59 %, una cifra muy superior a las arrojadas por los conflictos bélicos mundiales del Siglo XX. Esta ola de violencia inició luego de los Juegos Olímpicos Río 2016.
En la actualidad Río de Janeiro tiene 843 áreas controladas por bandas armadas, dentro de las que se cuentan favelas, conjuntos habitacionales, inmuebles específicos y hasta algunas vías urbanas, esto según la Secretaría de Seguridad de la ciudad.