Para ver más noticias escalofriantes ingrese AQUÍ
Marruecos estaba escandalizado por el atroz crimen de un niño de tan solo 11 años quien fue violado y luego asesinado. En las últimas horas el Tribunal de Apelación de Tánger condenó a muerte al asesino del pequeño "Adán" y que ocurrió en septiembre.
El asesino fue condenado por "asesinato con premeditación, secuestro con extorsión, ultraje al pudor sobre un menor de doce años, profanación de un cadáver y ocultación de pruebas", en un veredicto pronunciado tras una larga audiencia en la que el acusado principal se desvaneció y necesitó asistencia médica.
Los tres inquilinos del apartamento donde vivía el asesino han sido por su parte condenados a cuatro meses cada uno por no denunciar el crimen.
El niño estuvo desaparecido varios días y la última imagen que se tenía de él era la de una cámara en la calle que lo grabó caminando de la mano de un adulto perfectamente reconocible.
Durante esos días, el asesino se puso en contacto con los padres para pedir un rescate, con la presunta intención de borrar pistas, lo que añadió más dramatismo al caso.
El asesino, un joven llegado meses antes a Tánger para trabajar en una unidad industrial, confesó a la policía que engañó al niño en la calle, lo llevó al apartamento que ocupaba con tres compañeros de trabajo (ausentes en ese momento), lo violó y lo mató, y más tarde, en horas nocturnas, se deshizo del cadáver.
El crimen de Adnán levantó una oleada de peticiones para que se aplicase sobre el asesino la pena de muerte; condena que no se ejecuta en Marruecos desde 1994 pero que los distintos gobiernos se niegan a eliminar del Código Penal.