Transcurridas tres fechas de la Liga II en el fútbol profesional colombiano, la campaña del Deportivo Pasto es muy buena, ya que está en los primeros lugares del campeonato.
No puedo ocultar mi tristeza después de que el equipo perdiera 2-1 el sábado anterior ante Unión Magdalena, derrota que se dio en casa, donde la gente quería celebrar, tal y como ocurrió frente a Envigado en el triunfo por 4-0, sin embargo, los 7 puntos que ostenta el equipo no son producto de la casualidad, ya que se los obtuvo trabajando de buena manera en la cancha, por eso, se sumó un empate en Bogotá ante Millonarios, ganó en Montería contra Jaguares de Córdoba y se impuso en su patio frente a los antioqueños.
Lo que sí causa admiración es que mucha gente se deja llevar por las emociones en un abrir y cerrar de ojos. Cuando se gana el equipo es lo mejor del mundo y ya éramos campeones, pero ahora que se perdió somos los peores. Creo que hay que mantener la calma en cualquiera de las dos situaciones, es decir que se debe hacer valer el dicho que dice: ni tanto que queme al santo ni poco que no lo alumbre.
Aquí lo importante es seguir respaldando al Pasto, entendiendo que es una competición muy complicada y que los 19 equipos restantes se armaron para alcanzar sus objetivos. Los clubes grandes buscan el título, los de la mitad de la tabla quieren clasificar y también arañar un cupo a torneos internacionales, mientras que los últimos de la tabla del descenso salen en procura de tirar todas las cartas para evitar la caída a la Primera B.
Lo importante del comienzo de campeonato para Deportivo Pasto es que al equipo se lo mira bien, con varios jugadores que presentan un buen rendimiento y esperando que otros lleguen a su mejor expresión futbolística.
A los hinchas les digo que esto es de paciencia, simplemente porque no se ha ganado nada, ni tampoco se ha perdido todo. El próximo lunes el Pasto visitará al fuerte Atlético Nacional, vigente campeón colombiano, una prueba difícil de afrontar. Luego vendrá el Atlético Bucaramanga, el cual también viene haciendo las cosas bien desde el primer semestre del año. Aquí no hay rivales imposibles o adversarios fáciles, todos son muy complicados.
Aparte del aspecto netamente competitivo, la semana tuve la experiencia de estar en un entrenamiento del Pasto en el estadio Libertad y me gustó el buen ambiente que se respira dentro del equipo y en su entorno. Esto debe mantenerse para que así el Deportivo Pasto, los periodistas, los aficionados y todos los nariñenses seamos una sola familia.
Por: Claudia Zambrano Erazo
