Duque sobre diálogos con el ELN: «Hablar de paz mientras se asesina y secuestra es una burla a Colombia»

El jefe de Estado, indicó que desde su Gobierno no se avanzará en un diálogo de paz con el ELN, mientras sigan con el secuestro y los ataques armados.
Iván Duque, presidente de Colombia.

Iván Duque, presidente de Colombia, indicó que desde su Gobierno no se avanzará en un diálogo de paz con el ELN, mientras que el grupo guerrillero no cese prácticas como el secuestro y los ataques armados.

El mandatario indicó que el mensaje que se ha dado en los últimos «ha sido coherente». Las declaraciones de Duque se dan en respuesta al expresidente Juan Manuel Santos, quien mencionó que el actual Gobierno avanza en diálogos exploratorios con la guerrilla del ELN.

«Cuando empezó nuestro Gobierno, decidimos hacer una evaluación en un período de 90 días para hacer referencia a qué nos íbamos a encontrar y vimos que, durante la generosidad del Estado colombiano de sentarse 17 meses con el ELN, se cometieron 400 actos de terrorismo, asesinaron más de 100 personas y secuestraron más de 10 colombianos», indicó Duque.

Además, el jefe de Estado, recordó crímenes como el exalcalde Tulio Mosquera, secuestrado desde el pasado 24 de agosto de 2019, la muerte del exalcalde se conoció el pasado 5 de noviembre a través de un comunicado, por parte del grupo armado. «Vimos esos hechos deleznables como el de un carro bomba que le apagó la vida a 22 muchachos que apostaban por la paz sirviendo a Colombia», esto en referencia al atentado en la Escuela de Policía General Santander.

De acuerdo, con el presidente Duque, «el mensaje que le hemos dado al ELN ha sido coherente. Alcanzar la paz requiere un compromiso que no sea de palabra, ni discursivo y eso implica la liberación de todos los secuestrados y ponerles fin a los actos criminales. Pretender hablar de paz mientras se asesina y secuestra es una burla a la Colombia que construye la paz todos los días, por eso la amplitud parte de esos criterios».  

Finalmente, el jefe de Estado, enfatizó en que, «la paz no tiene dueño. ‘El tren de la paz‘ no le pertenece sino al pueblo colombiano, como está establecido en la Constitución, en ese bello Artículo 22 y por eso me siento también en el deber de hacer referencia a que, en la construcción de la paz, tenemos que enviar mensajes claros a quienes quieren desde la violencia quieren seguir arrebatándole la tranquilidad a Colombia». 

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